La piel de los niños aún está en desarrollo. Por lo tanto, es más sensible que la de los adultos. Esto es especialmente cierto en lo que respecta a los dañinos rayos UV. Solo hay una solución: Protector solar.
Tratamientos - Protección solar lo antes posible
La protección solar para niños consiste principalmente en educarlos sobre los daños que puede causar el sol. Un estudio alemán con niños pequeños ha demostrado que las siguientes medidas educativas mejoran en un 500 % las medidas de protección solar:

Consejos para protegerse del sol
- Los niños deben evitar estar al sol entre las 12 y las 16 h. En su lugar, puede animarlos a jugar a la sombra.
- Los niños deben usar sombreros de ala ancha, gafas de sol con lentes que filtren los rayos UV y ropa oscura (una camiseta negra protege mejor que una blanca).
- Aplique protector solar nuevo regularmente en todas las zonas de la piel que no estén cubiertas por la ropa (al menos dos veces cada dos horas y después de cada inmersión). ¡No olvide el pecho, el cuello, las orejas y los pies!
- Elija una crema que sea especialmente adecuada para la piel de los niños y que tenga factor protector, SPF 50. Debe ser impermeable y resistente a la arena.
- Los niños deben beber agua regularmente cuando estén expuestos al sol.
Por supuesto, como padres inteligentes, podéis conseguir el protector solar que os proteja a vosotros y también a vuestros hijos.
¿Por qué el protector solar es particularmente útil? ¿Es importante para los niños?
Los adultos saben que los rayos del sol pueden ser peligrosos. Pero no siempre son conscientes de lo letales que son para la piel de los niños. La piel de los niños aún se está desarrollando; es inmadura y, por lo tanto, muy susceptible a los rayos dañinos.
La piel de los niños es más fina y por tanto más susceptible a sufrir daños celulares profundos.
El sistema pigmentario aún no está suficientemente desarrollado y no ofrece protección UV (como ocurre en la piel de un adulto). Por lo tanto, los niños deben estar totalmente protegidos del sol, y en mayor medida que los adultos.
El 50% de nuestro capital solar se agota a los 20 años. Una de cada 55 personas nacidas en 2008 padecerá algún día melanoma. ¿Por qué? Los niños están excesivamente expuestos a los rayos UV. En vacaciones, un tercio de los niños pasa una media de 15 horas semanales en bañador y bikini: una cantidad excesiva, sobre todo teniendo en cuenta que el agua y la arena reflejan el 30% de los rayos UV. Además, los niños no pueden evaluar el peligro. Esto significa que no se les comunica su malestar hasta que el daño ya está causado. Las quemaduras solares y las agresiones en las células cutáneas más profundas causan daños irreparables y la debilitan a largo plazo (envejecimiento prematuro de la piel, mayor riesgo de cáncer de piel en la edad adulta).
Estos peligros incluyen los riesgos de deshidratación y golpe de calor.
¡IMPORTANTE! Todos los médicos desaconsejan la exposición al sol a los niños menores de tres años.



